Soy el creador y precursor en Argentina y Latinoamérica de la doma racional sin violencia, un método que transformó para siempre mi manera de entender y trabajar con los caballos. Desde hace más de 35 años me dedico a enseñar esta técnica propia que desarrollé, basada en el respeto, la paciencia y la comprensión del comportamiento animal. A lo largo de mi camino no solo domé caballos, sino también cebras, ciervos, antílopes y hasta guanacos, participando incluso en proyectos internacionales de conservación y reproducción de especies.
La doma racional sin violencia, como yo la entiendo, es una forma distinta de convertir a un animal salvaje en un compañero confiable, sin recurrir al dolor ni al sometimiento. A diferencia de los métodos tradicionales, que hacen que el caballo obedezca por miedo al castigo, mi técnica busca que el caballo confíe y coopere por decisión propia. Siempre digo: si los tratamos bien, si aplicamos los mecanismos y sistemas técnicos adecuados, se van a entregar. Y cuando eso pasa, lográs una relación basada en la confianza, que hace que el caballo sea más seguro y naturalmente manso.
Mi camino como docente empezó casi por casualidad, cuando una mujer para la que trabajaba me pidió que les enseñara a sus peones mi forma de amansar caballos. Ese pedido marcó un antes y un después, porque a partir de ahí empecé a transmitir mis conocimientos y a dar cursos por Argentina y el mundo. Llevo más de 35 años (¡más de 1500 cursos!) enseñando todo sobre caballos.
Hoy sigo enseñando porque estoy convencido de que un caballo bien tratado rinde mdejor, y que la verdadera seguridad, tanto para el jinete como para el animal, nace de esa confianza mutua.